
Mi viaje como doula
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Me convertí en doula de parto antes de siquiera escuchar la palabra. Estaba ayudando a mi mejor amiga en el parto de su tercer hijo y sabía que era mi lugar. Ella tenía muchísimas emociones, y ofrecerme su paz y guía durante el parto fue algo natural para mí. Fue un día que me cambió la vida, pero no sabía cómo seguir adelante.
Trabajando como consejera de lactancia materna en mi oficina local de WIC, aprendí más rápidamente. Poco después, otra querida amiga me pidió que la acompañara durante el parto. Fue fantástica. Me dijo: "Aquí está el curso, ve a tomarlo". Me alegro mucho de haberlo hecho. El curso me enseñó a conectar más profundamente con las emociones del parto. Me enseñó diferentes posiciones para ayudar a las madres a dar a luz con mayor comodidad. Me enseñó a aliviar su dolor mediante el tacto y el sonido. Y, lo que es igual de importante, me enseñó lo que una doula debe y no puede hacer, como ofrecer consejo médico o interferir en las decisiones que la madre toma con su médico.
¿Qué es una doula?
Las doulas de parto no son profesionales médicos. No estamos para tomar decisiones médicas por la familia ni guiarla en las intervenciones médicas. Tampoco estamos para reemplazar a la persona de apoyo en su vida. Estamos para apoyar el estado mental, físico y emocional de la madre y su pareja, si la tiene. De esta manera, se ha demostrado que la atención de una doula acorta la duración del parto y reduce las intervenciones médicas. Puedo dar fe de que las doulas también pueden ayudar a la persona de apoyo a sentirse como una estrella. (Sí, papá. ¡Deberías contratar a una doula!)
Ser doula no siempre es fácil. Si buscas un trabajo que te requiera estar disponible las 24 horas y, a veces, entrar en acción a las 3 de la mañana, ¡este es el trabajo ideal para ti! Las doulas nos comprometemos a estar presentes en el momento justo, sin importar la hora; nos comprometemos a estar presentes todo el tiempo, sin importar cuánto tiempo dure. Y, si también eres doula posparto, te comprometes a estar presente durante días o semanas después del nacimiento del bebé.
Una doula puede especializarse en el parto, el posparto o ambos. Siempre he trabajado como doula de parto, acompañando desde la etapa pregestacional hasta el parto. Pero otras se centran en el posparto y ayudan a las familias con diversas tareas. Pueden limpiar, lavar la ropa, cuidar a los hermanos mayores, preparar comidas, entre otras cosas.
Cosas a tener en cuenta
Aquí hay algunas cosas a tener en cuenta si estás pensando en contratar una doula de parto:
- Tómate el tiempo para entrevistar a varias doulas. Debes sentirte segura y cómoda con la persona a tu lado durante el parto.
- Revisa las referencias. Quieres saber si otros recibieron el apoyo que buscas.
- Ten claras tus expectativas. Las doulas ofrecen diferentes tipos de paquetes. Asegúrate de que el que elijas incluya lo que crees que necesitarás.
- Reúnanse varias veces antes del parto. Querrás conocer a tu doula antes del "día del parto".
- Tenga claras sus expectativas sobre la participación de su pareja en el parto. ¿Qué papel pretende desempeñar la doula? ¿Se ajusta a sus deseos y necesidades?
El día del nacimiento de tu(s) bebé(s) será un día que recordarás para siempre. Encontrar el apoyo que deseas y necesitas vale la pena el tiempo y el esfuerzo que requiere contratar a la doula adecuada. ¡Tú lo vales, tu pareja lo vale y tu(s) bebé(s) también!
Acerca del autor
Este artículo fue escrito por Renee E. Davis, IBCLC. Renee ha sido la IBCLC principal en Rumble Tuff desde octubre de 2018. Fue consejera de pares de WIC, doula y asistente de partería. Actualmente tiene una consulta privada de lactancia en el centro de Misuri.